
Isabel Fábregas.
Directora provincial de Valladolid.

“Mucha gente me pregunta qué hace aquí una ingeniera como yo”
Es ingeniera de Telecomunicaciones y funcionaria del Cuerpo Superior de Sistemas y Tecnologías de la Información de la Administración General del Estado. Fue responsable de la red de comunicaciones del ministerio de Administraciones Públicas. En el sector privado, fue una de las responsables del Centro Tecnológico para el Desarrollo de las Telecomunicaciones en Castilla y León (Cedetel). En 2013 se incorporó a MUFACE como directora del SP de Palencia y lleva al frente de la oficina de Valladolid desde 2016.
¿Cómo encara 2023 este Servicio Provincial?
El cambio de oficina nos permitirá resolver un grave problema de accesibilidad y poder disponer de un espacio a pie de calle, más amplio y diseñado para atender mejor al colectivo mutualista. Ahora mismo estamos ejecutando las obras de reforma y se ha previsto el traslado en el primer semestre de 2023.
¿Qué tal está funcionando el sistema de cita previa; lo ha asumido bien el colectivo?
Algunos mutualistas son muy críticos con el sistema. Sobre todo se quejan de las llamadas al 060, porque hablan con una máquina y tiene coste económico. Intentamos redirigirlos a la página web o la App móvil. Aunque la mayoría de las gestiones se pueden tramitar por otros canales, muchos mutualistas se muestran reacios al cambio y prefieren la atención presencial.
¿A qué tipo servicios debería darle una mayor prioridad la Mutualidad?
Sobre todo, continuar con la digitalización de los procedimientos, poniendo el centro en las personas, que son las protagonistas de la transformación digital de MUFACE. Esto permitirá agilizar las gestiones de los mutualistas así como el trabajo diario del personal funcionario. Otra prioridad es acelerar la receta electrónica concertada, que evitará el trasiego de los talonarios y las recetas en papel, y nos proporcionará una mejor gestión y control del gasto farmacéutico.
¿Logran aplicar bien las medidas de ahorro energético?
La pandemia nos obligó a ventilar con mayor frecuencia las oficinas y disminuyó la utilización del aire acondicionado. Gracias a la concienciación y buena disposición de todos, este verano ha continuado el uso moderado del aire acondicionado; si bien es cierto que en Valladolid el principal problema de temperatura lo tendremos en invierno. También intentamos minimizar el uso de papel, reduciendo las impresiones al mínimo necesario. Y separamos los residuos para contribuir a su reciclaje.
¿Cuáles son los servicios y prestaciones más complicados de resolver?
Las solicitudes de tratamientos avanzados, los medicamentos de dispensación hospitalaria, o las reclamaciones de asistencia sanitaria. Especialmente cuando el mutualista acude con un grave problema de salud y la situación exige una mayor cercanía y empatía. En general tratamos de agilizar la tramitación de las prestaciones, y en particular el subsidio IT, porque supone una cuantía importante para el mutualista y hay que evitar cualquier retraso en los pagos.
¿Qué le resulta más gratificante del trabajo diario?
El agradecimiento de mutualistas a los que has ayudado para agilizar una gestión con la entidad; los que te cuentan que han finalizado un tratamiento con éxito; y el equipazo de esta oficina: Alberto, Ana, Idaira, Julián, Marcos, Mercedes, Patricia, Pilar, y Roberto, sin olvidar a Mercedes, Marian, Henar y Víctor que se han jubilado. Por su profesionalidad, implicación y adaptación a los cambios. Sin olvidar a los compañeros de otros servicios provinciales y de los servicios centrales, siempre dispuestos a echarte una mano. Es muy gratificante. Mucha gente me pregunta qué hace aquí una ingeniera como yo; diría que este trabajo ofrece muchísimas oportunidades de aprendizaje en un entorno que está en continua evolución.