“El surf te cambia la perspectiva de los problemas diarios”

Cuenta Ana Sánchez que empezó a estudiar la oposición al Cuerpo de Farmacéuticos Titulares en 2007, al fallecer su padre. Y tuvo que compaginar los estudios con su trabajo, primero en una farmacia y después, durante unos años, en la industria farmacéutica y en la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, todo en Madrid, su ciudad natal. Al aprobar la oposición, no eligió destino: “Me tocó venir a Tenerife y ahora, al pensarlo, estoy agradecida, porque creo que tuve mucha suerte”.

¿Qué puestos ha ocupado en la isla en estos años?

Estuve de inspectora de farmacia en la Dependencia de Sanidad hasta que empecé a trabajar en MUFACE.

Lleva cuatro años como directora provincial de Tenerife. ¿Tiene una complejidad añadida el hecho de coordinar varias islas?

La labor que hacemos es la misma que en todas las oficinas -gestión de prestaciones sociales, sanitarias, reclamaciones… - pero es verdad que la insularidad supone en ocasiones un reto adicional. La colaboración, la cual aprovecho para agradecer, que mantenemos con las Direcciones Insulares de las islas de La Gomera, El Hierro y La Palma para la realización de algunos trámites a nivel de isla menor es clave para los mutualistas que residen en dichas islas.

¿Ya se nota la reciente implantación de la receta electrónica concertada y pública?

La receta electrónica para mutualistas de opción concertada, que se viene a sumar a los de la pública, ha supuesto un avance fundamental. Gracias a la continua digitalización del organismo, ahora casi todo puede hacerse de manera telemática, aparte de conservar otras vías presenciales para el colectivo mutualista jubilado sin que requiera desplazarse a Santa Cruz de Tenerife. Aún con todo, somos conscientes de que hay aspectos inherentes al hecho de la insularidad que suponen diferencias respecto a provincias no insulares.

¿Cómo lograron atender a los mutualistas de La Palma, tras la erupción del volcán?

Muchos residentes de la zona afectada por el volcán tuvieron que abandonar sus casas, e incluso hubo algunos que la perdieron. Desde el Servicio Provincial tomamos distintas medidas para facilitar en todo lo posible las gestiones que tuvieran que hacer con la oficina, teniendo en cuenta la situación extraordinaria que se había producido.

¿Cuándo le surgió la idea de empezar a surfear en sus ratos de ocio?

Tenía muchas ganas de probar este deporte y, hablando con una amiga, nos decidimos a probar. Buscamos sitio, fecha y escuela, y nos apuntamos a un curso de una semana.

¿Sigue yendo a la escuela de surf o ya va por libre?

Empecé con el curso de iniciación y ahora voy una tarde a la semana con un profesor. También intento ir por libre cuando puedo y si las condiciones son suaves; es decir, aptas para mi nivel de principiante.

¿Por dónde suele ir a pillar olas?

Es secreto -comenta sonriendo. Siempre miramos el parte y vamos donde haya condiciones fáciles para poder disfrutar del baño.

¿Ha cambiado mucho de tabla?

He ido cambiando hasta la que tengo ahora. Al principio no sabes mirar, ni sabes lo que te conviene según tu nivel, ni conoces a nadie para que te asesore… Y así hasta hoy que tengo ya ¡cuatro tablas!

¿Cada cuánto sale a practicar?

Pues depende de la época. En verano voy más que en invierno porque las condiciones son más fáciles. Una vez dentro del agua, puedo llegar a estar dos horas surfeando. Ahora por circunstancias, he tenido que estar un tiempo sin poder meterme y estoy intentado volver poco a poco.

¿Qué le aporta el surf?

Se dice que “para todo mal el mar, y para todo bien también”…y es verdad. En mi caso, es una manera de desconectar la cabeza y aunque sales del agua cansada físicamente, la sensación es de relajación y la perspectiva frente a los problemas que puedas tener ese día cambia; entrenas la paciencia, disfrutas de unas puestas de sol brutales, y me ha permitido conocer a gente que hoy son muy buenas amigas y amigos. También tiene su parte negativa, como que no haya olas cuando tú tienes tiempo, o algún que otro golpe y cortes me he llevado. Los erizos son traicioneros.

¿Ha probado a surfear fuera de Tenerife?

He aprovechado a meterme en el agua en alguno de los sitios a los que he viajado -Fuerteventura, Cantabria…- pero no he hecho ningún “surf-trip” en condiciones, y tengo ganas.

¿Le gustaría llegar a participar en algún campeonato?

Rotundamente, no. Para mí esto un hobby, siempre intentas aprender un poco más pero…las competiciones están fuera de mi alcance y nivel. Prefiero practicar el surf por puro placer.